Sin duda mi respuesta es una tabla de natación de espuma de PE. Porque podemos usarla para hacer algunos entrenamientos diarios, entrenamiento de natación o juegos de playa para niños.
La materia prima de este producto es muy respetuosa con el medio ambiente y es mucho más gruesa que muchas tablas flotantes ligeras. Su densidad también es relativamente alta, por lo que tiene más flotabilidad. Por cierto, lo más importante es la textura de la superficie, que puede aumentar en gran medida la fricción y evitar el peligro de soltarse accidentalmente al jugar.
No tiene mal olor y no es irritante en absoluto, por no hablar de la contaminación del agua de mar o del medio ambiente. Además, no le teme al agua de mar, ni a la grasa, ni siquiera a los ácidos y álcalis, por lo que no hay que preocuparse de que se erosione fácilmente con otras cosas.
Disponemos de diferentes colores, de libre elección, como azul, naranja, amarillo, verde, negro, rosa, gris... también puedes personalizar tu propia tabla de patadas como quieras.
El grosor de su empuñadura es cómodo, por lo que puedes sujetar ambos lados de la tabla para practicar el equilibrio y entrenar las piernas para patear el agua. También puedes colocar las manos en diferentes partes de la tabla para ajustar la posición de entrenamiento que te resulte más cómoda. O bien, colocar la cinta entre las piernas, de modo que los dos reposabrazos queden colocados delante y detrás del cuerpo, y puedas hacer las brazadas con ambas manos.
